Basta de vodeviles políticos

Basta de vodeviles políticos

Arganda del Rey está siendo escenario de un vodevil político montado por Vox y PP, con el fin de estigmatizar al colectivo trans y fomentar la confrontación ciudadana, convirtiendo un supuesto problema de convivencia en un espectáculo con fines políticos y no un debate sobre derechos y convivencia.

El Ayuntamiento de Arganda del Rey, bajo la dirección de Alberto Escribano, ha emitido comunicados que confunden y distorsionan la realidad de la Ley Trans. En lugar de abordar los problemas de convivencia desde una perspectiva inclusiva, y mediadora que se cabe esperar por parte de la figura que representa, en cambio ha optado por señalar a la ley, al ministerio y al colectivo trans como responsables de situaciones que requieren un enfoque más matizado.

El caso que ha iniciado un debate sobre la Ley Trans en Arganda del Rey :

La persona transgénero, identificada como José Luis A., empresario de la zona, ha solicitado el uso de un baño separado en el polideportivo para, según esta persona, evitar conflictos. José Luis es conocido por su activismo político, candidato a la alcaldía por Vox en un municipio de la zona de las Vegas, proliferador de mensajes en redes sociales racistas, homofóbicos y antifeministas. 

Transgénero: Son las personas que sienten que el sexo que le asignaron al nacer (por sus órganos genitales, cromosomas y hormonas) no coincide con el género con el cual se sienten identificadas. Algunas usan vestimenta, tienen comportamientos y gestos para transitar del sexo biológico a su identidad. En el caso de José Luis no se le conoce públicamente ningún cambio de identidad, lo que no quiere decir que sus sentimientos no sean reconocidos, pero es que desde la aprobación de la ley trans, hemos podido ver dos posturas: por una parte, quien ha pasado, conoce o tiene experiencia de trato con esta ley, ya que le era necesaria, no tiene conflictos de este tipo. Y por otra hemos visto casos apoyados por los medios y por influencers de derecha en redes sociales, todos hombres, intentando hacer creer a la ciudadanía que se han cambiado el sexo para beneficiarse de unas inexistentes ventajas por genero.

Y desde Podemos Arganda pensamos que este “conflicto” con la Ley Trans no es más que un intento de hacer creer a la ciudadanía que hay conflictos entre los ciudadanos, aprovechando el tirón que está teniendo este tema en los medios de comunicación más conservadores y reaccionarios. 

Casos como este deben ser investigados y tratados como excepciones, no como la norma, para evitar que se utilicen como excusa para discriminar a quienes legítimamente ejercen sus derechos. Esto requiere marcos legales cuidadosos y mecanismos para detectar y abordar posibles abusos sin infringir los derechos legítimos, marcos legales que estos partidos impiden crear para tener relevancia mediática y buscar de esta forma el enfrentamiento y la división de la población. 

Esta postura, proliferada por el propio alcalde, presenta a las personas trans como una amenaza para la privacidad y la seguridad en espacios públicos. Este tipo de retórica no sólo es inexacta, sino que también alimenta la transfobia y el miedo infundado e instamos a los protagonistas de este vodevil político a rectificar sus declaraciones y a pedir disculpas al colectivo trans, que está siendo injustamente señalado. 

Por último queremos recordar a las autoridades locales que desde su posición deben promover un entorno de respeto y convivencia pacífica. Las mujeres trans son mujeres, y sus derechos deben ser defendidos con la misma firmeza que los de cualquier otro ciudadano, y no convertirlos en motivo de controversia, e intento de justificar el acoso o fraude.

 

Pd: Es necesario destacar que el reconocimiento de las personas trans sin condiciones —la “autodeterminación”— no es una ocurrencia del Ministerio de Igualdad, sino que es una exigencia natural derivada de la propia despatologización de la realidad trans que hizo la Organización Mundial de la Salud mediante la Clasificación Internacional de Enfermedades —un instrumento de referencia en salud— en 2018, así como una exigencia legal derivada de la aprobación de la resolución número 2048 en 2015 por el Consejo de Europa mediante la cual se instó a los países miembros a “desarrollar procedimientos rápidos, transparente y accesibles basados en la autodeterminación, para cambiar tanto el nombre como el sexo registral de las personas trans”. 

Países de nuestro entorno como Dinamarca, Irlanda, Malta, Noruega, Bélgica, Portugal, Luxemburgo e Islandia llevan desde 2014 aprobando leyes trans basadas en la autodeterminación. En España, desde 2018 se puede cambiar el nombre de masculino a femenino y viceversa sin ningún requisito más allá de solicitarlo, como recoge la instrucción de la Dirección General del Registro y del Notariado de fecha el 23 de octubre de 2018. El propio Tribunal Constitucional, en su sentencia 99/2019 de 18 de julio de 2019 ya habla de autodeterminación: “La identidad de género sería la vivencia interna e individual del género por cada persona, que sería fruto de su autodeterminación”. En igual sentido se ha pronunciado el Tribunal Supremo, en su sentencia número 685/2019, de 17 de diciembre de 2019.

También sabemos buscar en google como el señor alcalde 😉